Roble Chileno – Pellín – Hualle / Nothofagus Obliqua

Árbol de hasta 40 m altura. Sus hojas son ovaladas, de base ligeramente asimétrica, margen irregularmente dentado, y de unos 2 a 5 cm largo. Caduco en otoño tomando sus hojas bellos colores que van desde el amarillo al naranjo con tonos rojizos, dejando la estructura desnuda a finales de la temporada.

La Especie:

Se encuentra en Chile y en el sur de Argentina. En nuestro país aparece en los cerros de la cordillera de los Andes de San Fernando (VI Región) de manera masiva y su límite sur corresponde a la X Región, distribución que debe ser estudiada debido a la separación de Nothofagus macrocarpa. (Roble de Santiago) Esta especie es muy frecuente en el Llano Central de la IX Región. Prefiere suelos fértiles y profundos, adaptándose también a otro tipo de suelos donde la humedad no sea limitante.

El Bonsai:

Por ser una especie caduca, es bastante buena para el trabajo del bonsai logrando en algunos casos, excelentes trabajo de jin y sharis por la gran capacidad de resistencia a la humedad de su madera, a pesar de no ser una técnica muy utilizada en las caducas en general. Se acomoda bien los trabajos generales del Bonsai, rápido de foliar, con ramificación fina, ramas flexibles, troncos largos y de buena textura rugosa con placas grandes cuando es adultos. Como bonsai los estilos de formación son algo que no cumple ninguna norma establecida, se pueden formar según las reglas japonesas, como también, en un estilo más natural y con carácter chileno, siguiendo los modelos que la propia naturaleza nos da como ejemplos. Generalmente los estilos Moyogi (recto informal), Hokidashi (escoba) y Bunjingi (estilo libre o literati) son con los que se tiene más afinidad. Los tamaños son variados, pero se acomoda muy bien a estilos pequeños (Mame / Shohin) puesto que sus hojas reducen su tamaño a 1/3 su tamaño original.

Trabajos:

Poda y pinzado:

Las grandes podas se deben realizar a finales de invierno, los trabajos de podas menores durante toda la época de crecimiento y hasta la mitad del verano. Fácil de foliar con continuos pinzados, técnica fundamental para mantener la estructura. Las podas menores se deben de realizar dejando un centímetro de distancia entre el brote y la parte podada, puesto que los cortes tienden a retroceder. Se puede desfoliar a mediados de primavera o cuando las hojas ya han madurado del todo, pero este trabajo no es muy recomendable puesto que tiende a secar algunas ramas. Para tal tarea se de abonar correctamente la planta y estar seguro de que goza de buena salud. Además esta técnica se debe de realizar cada dos o tres años, para asegurar que la planta está completamente recuperada del shock que esto significa. Hay que cuidar muy bien de sellar prolijamente los cortes de ramas que se han podado, puesto que esta variedad de Nothofagus sufre de constantes ataque de arañitas rojas, larvas minadoras y de algunos tipos de virus.

Alambrado:

La tarea de alambrado es bastante fácil de realizar. Se debe comenzar con el modelado de las ramas justo cuando las yemas comienzan a mostrar actividad, además es una buena época, puesto que se encuentra sin sus hojas y será simple visualizar el diseño elegido. Cabe señalar que la corteza de ramas jóvenes son bastante delgadas y suele herirse con facilidad durante esta operación. Además es poco común que las ramas heridas se sequen por completo, pero es algo de lo que hay que estar preparado.

Trasplante:

El trabajo en las raíces se realiza justo cuando se nota actividad en las yemas de las ramas, (comienzos de primavera).La poda de raíces se debe hacer paulatinamente cada 2 años las plantas jóvenes y 3 a 4 años las muy viejas o recolectadas y sin podar demasiado. Si fuese realmente necesario, se puede trasplantar durante el primer y segundo mes de otoño, cuidando de no realizar podas de raíces muy drásticas. Para esta técnica corre lo mismo señalado para el Coihue (N. Dombeyi y N. Nitida)

Riego, Abonado, Vías de obtención y Sustratos:

Lo anteriormente descrito para el Coihue (Nothofagus Dombeyi / Nitida) sirve para esta especie. El abonado de otoño (el primer mes) se realizará con un abono completo y así asegurar el aporte de nutrientes necesarios para obtener una bella coloración de sus hojas antes de la caída. Luego se aporta abono con bajo contenido de nitrógeno desde el segundo mes de la temporada hasta el primer mes de invierno, esto ayudara a endurecer las raíces

Situación:

el mejor lugar para colocarlo es a semi-sombra, resguardo del sol directo el mes de Septiembre y los meses Enero y Febrero, en invierno dejar a la intemperie sin mayores cuidados y que gusta de las lluvias y de las bajas temperaturas en los meses fríos. En caso de desfoliar, su mejor lado será directamente al sol y tratando de evitar el abonado. Cuidar de fuertes vientos, especialmente en verano puesto que tienden a secarse los bordes de las hojas.